Demasiado bueno como para tener un final así... ¿no creen? El cordobés demostró un hermoso juego durante toda la semana, generó grandes ilusiones para los amantes del tenis, pero es posible que el cuerpo le haya pasado factura y por eso terminó así.
Cayó en la final del ATP de Auckland frente a David Ferrer por 6-3 y 6-2. De esta manera el duelo entre ambos lo sigue liderando el español, pero por 7-5.
El partido fue muy fácil. Ganó el que pensó mejor. Ferrer quebró en las ocasiones justas, y David no tuvo respuestas a nada y se quedó con las ganas de conseguir su décimo segundo titulo en su carrera.
Pero ya damos vuelta de página... Se terminó Auckland, empieza el Abierto de Australia, y el cordobés tiene un duro encuentro frente al local Lleyton Hewitt.
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